Siempre hay un tiempo especial para pintar un pote gallego especial, una amiga mía me pidio que se lo decorara, y ¡como no! viendo su carita de buena, no hay modo de negarse, lo hice encantada y disfruté de lo lindo pintándolo, con unas cuantas pinceladas largas y otras pocas pequeñas, pronto estuvo listo.
Fantastico pote gallego, como tu dices con unas simples pinceladas ¡Ay Remedios! per lo más importante es saber como se dan y ya se nota que tu eres una experta.
ResponderEliminarUn abrazo
Que bonito te ha quedado el pote, con esa flor roja tan viatosa, me gusta mucho.
ResponderEliminarBesos
Es que los potes son muy agradecidos Cecilia, ya ves con algo tan sencillo como una flor, sin hacer siquiera un esbozo antes, lucen así de bonitos.
ResponderEliminarUn abraciño
La flor en rojo fuerte sobre el fondo negro queda muy lucida y ya se puede colocar el pote en cualquier lugar,quienes más los aprecian son los gallegos que por diversas circunstancias tienen que estar lejos de su tierra, como es el caso de este pote que se fué bastante lejos de aquí.
ResponderEliminarRosa, un fuerte abrazo