A Dana le gusta tanto el agua, que esta temporada de lluvia se lo pasa en grande. No necesita ir al río ni al canal de la central eléctrica a bañarse, por la carretera que la llevamos de paseo, que va bordeando la montaña, baja tanta agua que se forman unos riegos por los laterales. Siempre que llegan borrascas fuertes estos pequeños riegos se llenan tanto que incluso llenan de agua el centro de la calzada.
Así que ella se pasa al menos casi dos horas metida en el agua ¡es increible!. Como el agua está tan limpia, tan transparente, a veces en las fotos no parece que está en el agua y sólo se nota en que las patas se le ven distorsionadas, lo que le hace parecer como un bicho raro. Está graciosa pero horrible.
Más fotos de distintos días, en estas con su amiga Pipa:
Algunas fotos más:
Fijaros en las patas de Dana en estas dos fotos:
Tienes toda la razón Remedios, Dana esta graciosa en esas fotos en que los pies le parecen de pato y parece mucho más pequeña que en la foto que está sentada con algo en la boca que parece una piña ¿puede ser? Y que bien se lo pasa...deja que cuando llegue el verano, hay que hacerle una piscina ¡jeje! Un abrazo
ResponderEliminarMe hacen mucha gracia las fotos de tus perras, las de hoy son buenísimas y Dana está muy graciosa. Es increible lo que le gusta el agua.
ResponderEliminarUn abrazo
Aunque parece mentira la foto de los "pies de pato" y en la que está con una piña ( efectivamente era una piña ) son hechas el mismo día, es que cuando está mojada parece mas pequeña.
ResponderEliminarEn casa ya le tenemos una piscina pequeñita, ahora ya casi no cabe, pero ella se apaña para remojarse.
Carolina, un abrazo y gracias por tus comentarios
Es una pasión lo que tiene Dana con el agua, me figuro que cuando llegue el calor será mucho más.Lo bueno es que se sacude n par de veces y cuando llega a casa ya está seca.
ResponderEliminarCelia, un fuerte abrazo, estaremos en contacto.